Los gastos de envío son gratuitos a todo el mundo | World wide free shipping Descartar
320,00 €
Hay obras que se hacen con técnica, con intención, con trazo. Dentro no es una de ellas. Dentro es una obra que se escupe.
Esta pieza forma parte de la serie Vilipendios, aunque quedó fuera del libro ilustrado. No va acompañada de ningún poema, y tal vez por eso es aún más honesta. No necesitaba palabras. Era suficiente con lo que tenía que decir por sí sola. Es un autorretrato emocional. No el primero que hago, pero sí uno de los más violentos. Un retrato de mi yo interior en una época en la que todo era ruido, insomnio, alcohol, drogas, ansiedad, noches largas y días rotos.
La imagen surge desde una mancha, como todas en esta serie. Pero esta vez lo que encontré fue un monstruo. Una figura que grita, deformada, como si algo dentro quisiera escapar por la garganta. Detrás de su cabeza, estallan manchas de rojo sangre y rabia. Y junto a él, una figura que parece flotar, medio sumergida, como un cadáver que aún no ha terminado de hundirse. Esa cabeza nos mira. Directamente. Y es imposible no devolverle la mirada.
La técnica es la de la decalcomanía con acuarela, que permite que las formas se revelen por azar. Luego usé rotulador plateado para definir, para extraer lo que ya estaba ahí. Como decía Miguel Ángel —salvando todas las distancias—, “la escultura ya está en la piedra, solo hay que liberarla”. Eso es lo que hago con estas manchas: las miro hasta que veo lo que hay dentro, y entonces lo saco, lo muestro. Lo comparto.
Dentro es una de esas obras que no se piensan: se sienten, se sobreviven. Una pieza única, descarnada, honesta. Una emoción congelada en el papel.
Si este grito te toca, si reconoces algo en su mirada, puedes escribirme a evangb@me.com para saber más o adquirirla.
En stock
Usamos cookies y otras tecnologías para mejorar tu experiencia y recordar algunos datos del dispositivo. Al aceptar, podremos analizar tu navegación y personalizar tu visita en nuestro sitio. Si prefieres no aceptar o cambias de opinión, es posible que algunas funciones no trabajen como deberían.